domingo, 18 de febrero de 2018

Todo es gracia - Evangelio del 22/02/2018 Jueves I de Cuaresma - Mt 16, 13-19



Este día, la liturgia de cuaresma coincide con la fiesta de la cátedra de san Pedro, signo de la misión de enseñanza que Dios ha confiado a los pastores de su Iglesia, de los cuales Pedro es garantía de comunión. La santidad es para todos, ovejas y pastores, pues en la Iglesia de Cristo nadie es superior, tenemos diferentes servicios, pero nada más. Teniendo la conciencia de que todos hemos sido salvados por gracia inmerecida y de que Cristo es el único y verdadero pastor, estaremos seguros de pertenecer a su rebaño. Por eso es muy importante que todos sepamos bien en la mente y en el corazón, que Jesús es el único pastor.
En el Evangelio, Jesús pregunta a sus discípulos ¿quién dice la gente y quién dicen ustedes que soy yo? Gran parte de su ministerio, Jesús insistirá en dejarles bien claro que Él es el Señor, el Rey de Reyes,  y que ha venido a servir, que está dispuesto a dar su vida para que ninguno de los que el Padre le ha dado se pierdan. Esa es la vocación que nos une, el servicio a los demás, el anuncio de la buena noticia de que Dios es amor supremo. El discípulo debe seguir a su maestro, imitarlo.
Todos conocemos algún cristiano, oveja o pastor, que no da buen testimonio. Todos hemos sido testigos, en uno mismo o al mirar a otros, que es tan fácil perderse, abandonar el camino del servicio. La tentación más grave no es sólo abandonar el camino, sino, permaneciendo en Él, ser falsas ovejas o falsos pastores, y querer aprovecharnos sólo de los beneficios, las reverencias, el poder o la fama que un servicio puede otorgar. Como cristianos, nuestra única gloria es la Cruz de Cristo, nuestra única presunción es saber que soy salvado porque Dios es bueno, y sólo Él. ¿Somos cristianos que imitan así a su Pastor? Cada vez que menospreciamos a alguien o lo apartamos juzgándolo como pecador, no somos ejemplo de Cristo, no somos cristianos. Un cristiano no condena, llama a la conversión; un cristiano no destruye la fama de nadie, da la cara por él; un cristiano no dice: cambia para que Dios te ame, sino: date cuenta de lo mucho que te ama Dios y respóndele; no dice: aléjate, sino: acércate a la fuente de salvación. Por más estudios teológicos que tengamos, por más conocimientos litúrgicos o pastorales que hayamos recibido, sin la caridad, no son nada, absolutamente nada. Tú, pastor, ¿amas al rebaño de Dios? Tú, coordinador, ministro de la Eucaristía, responsable de grupo, coordinador de actividades, cabeza de un movimiento ¿eres incluyente o excluyente? ¿coincide tu enseñanza de palabra con tus obras? Tú, papá o mamá ¿estás consciente de que esta es la religión que debes enseñar a tus hijos, amar a Dios sobre todas las cosas y a los demás como iguales?
Pedro le respondió a Jesús: “Tú eres el Mesías, el Hijo del Dios vivo”, aunque aún no comprendía lo que eso significaba. Lo comprenderá después, al haber negado a su Maestro y, una vez resucitado, haber experimentado su perdón y misericordia que le confía aún cosas más grandes. Pedro experimentó su miseria y la misericordia de Dios, experimentó en carne propia la necesidad del Mesías en su vida. Y tú ¿tienes hambre y sed de salvación? ¿estás consciente de tu pecado? ¿reconoces que sólo porque Dios es bueno es que hoy puedes llamarlo Padre? No te acostumbres a ser un bautizado, vuelve a descubrir el inmenso don que el bautismo te ha otorgado aún antes de que tuvieras conciencia de ello, ser salvado por gracia.


Última publicación

Canto: "Agua de Vida" - de Andrés Degollado - Canta fray alex

Agua de Vida. Descarga este y otros de mis cantos aquí: https://frayalexblog.blogspot.com/p/mp3.html   Agua de Vida M. y L. Andrés Degollado...